
Como no hay una laminadora especial en el país, tienen que traer la chapa para los tubos de Brasil, según Clarín.
Por: Silvia Naishtat
Es raro, pero el gasoducto de Vaca Muerta, que se presentaba como una gran oportunidad, por lo menos está metido en un gran lío. Cristina Kirchner se quejó en Tecnópolis de que los tubos no fueron fabricados en Argentina, a lo que el exministro Kulfas, quien ya fue destituido, respondió que podrían haber sido entregados a otra empresa, Laminados Industriales. Sin embargo, esta empresa aclaró que no están en condiciones de fabricarlos.
La placa de acero para estas tuberías de 36 pulgadas de espesor para transportar un mayor flujo de gas requiere especificaciones de ingeniería muy exigentes. Deben tener aprobación API (American Petroleum Institute), que es la calidad estandarizada para gasoductos, y también pasar las pruebas X 60 y X 70. Son tuberías de alta resistencia preparadas para la compresión de gas, lo que significa que pueden inyectar más volumen.
Estas placas se fabrican en un molino especial de inversión, que no existe en Argentina, y se fabrica en Usiminas, Brasil. “Tomar una decisión de inversión de estas características no es solo una inversión multimillonaria, sino mucho más tiempo. Y cada año de atraso significa por lo menos $2.000 millones en importaciones innecesarias”, señalaron desde la Casa Rosada. Por supuesto, la chapa se produce en Brasil y se lleva a la planta Seat de Techint en Avellaneda, Buenos Aires, para su costura.
Javier Tizado estuvo a cargo del gasoducto Neuba II para llevar gas desde Loma La Lata en Neuquén hasta AMBA. Fue construido en 1988 y recorrió 2.201 kilómetros. Tizado le dijo a Clarín: “Tuvimos el mismo problema con el Neuba II y trajimos una parte importante de la chapa de Japón y lo mismo de México. En 1973, Perón ordenó a la entonces estatal Somisa importar un tren de laminación para este tipo de láminas, llegó, nunca fue desarmado y permaneció en un galpón. Cuando se privatizó Somisa, el tren de laminación no estaba incluido y finalmente se desmanteló y se ofreció por separado”, dijo.
En cuanto a los pliegos de la licitación del gasoducto Néstor-Kirchner, es un secreto a voces que fue elaborado con la ayuda de Antonio Pronsato, excontralor de Enargas durante el largo mandato de Julio de Vido. Pronsato renunció o fue despedido, según a quién se consulte. Lo cierto es que la dirección de las obras públicas más importantes ha quedado en manos de Agustín Gerez, presidente del estado IEASA (Integración Energética Argentina). El abogado de 39 años, que se describe a sí mismo como “el soldado de Cristina”, accedió a la función pública por la relación de su padre, el abogado cruceño, con la familia Kirchner. En esta empresa reportan a Federico Basualdo, Secretario de Estado de Energía.
Le dieron a Tenaris, filial de Techint, la participación de los tubos. Tenaris fue el único proveedor. Cuando se le pregunta por qué no había otros competidores, la respuesta es el contexto internacional con la guerra en Ucrania creando incertidumbre debido a las tarifas de flete y un aumento inesperado en los precios de la energía. Y argumentan que Techint es el principal productor de tubos de acero del mundo, y además, construyó casi todos los gasoductos del país.
El gobierno paga el techint en pesos. Y surge otra tensión. Techint está tratando de acceder a los dólares para gestionar la compra del disco y su finalización en Argentina. (Clarín)